lunes, 30 de julio de 2012


Run Forest, Run

Transformada en tradición de SU, iniciada por José “Energy” Cordeiro, uno de los faculties más delirantes de la universidad, todos los años los participantes del GSP asisten a la maratón de San Francisco. Casualmente, esta maratón se realiza el último domingo de julio y coincide con el curso. Podría decirse que es una tradición más que sana, sino fuera porque el objetivo lejos está de ser una cuestión de salud. El objetivo es obtener la medalla sin correr.

José tiene el circuito planeado que repite año tras año desde el 2009. La organización comienza un mes antes, casi junto con el curso, con el diseño de la remera de la maratón de la universidad. Se hacen varios diseños, se elije uno y se manda a imprimir para que esté lista el día D.

El día comienza muy temprano a la mañana, a las 6.00 AM se parte y se hace un circuito por la ciudad sacándose fotos con los carteles de SU. Alrededor de las 9.00 AM se llega a uno de los extremos del Golden Gate, único momento en el que, el que quiere, corre. Ahí son un poco más de 6Km donde se disfruta un poco el paisaje, pero el objetivo es transpirar para dar el golpe final.

A las 11.00 AM se llega al punto final de la maratón, en auto claro está, y comienza la aventura. La idea es que hay que correr por el borde en dirección contraria hasta encontrar la oportunidad de saltar el cerco, sin que te vean los organizadores, y sumarse a la masa de cansados maratonistas. Cometido el ilícito, hay que perderse en la multitud, dispersarse para que no parezca tan obvio y, al llegar a la meta, hacer como si llegase con el último aire para hacerlo más realista. Si todo sale bien, voilá, lo galardonan con una medalla que dice “Worth the hurt”, es decir, el dolor vale la pena.

Al cruzar la meta, la gente te saluda, te viva, te da palmadas en la espalda y te admira. Casi como si hubieras corrido los 42km. En nuestra defensa diré que, dado que somos una masa de 80 nerds, correr 8 km es como que una persona normal corra 168km. Así que la medalla y la admiración está más que merecida!

martes, 24 de julio de 2012


Afectar positivamente 1 billón de personas: Romper el Sistema.

“Creo que con el tiempo merecemos no tener gobiernos”. Jorge Luis Borges
Como en un remolino, esto se acelera cada vez más. Promediando la sexta semana de curso parece que en vez de estabilizarse o, aunque sea, acostumbrarse al ritmo, el trajín de SU te lleva puesto. La semana pasada empezaron los proyectos de equipo, tuvimos 12 módulos de clase, 2 workshops, 3 firesides, la jornada de super coaching (sobre la que todavía hay repercusiones), visité los HQ de HP y de Google, tuvimos un sábado de unconference y, para cerrar, la cultural night de Asia y Medio Oriente. Todos los días empezaron a las 9 y terminaron cerca de las 22. El domingo libre, aproveché para ir al museo de la historia de la computadora.

El proceso para formar los equipos de proyecto fue, básicamente, que no había proceso. Cada quién se juntaba con quién le parecía para tratar el tema que más le gustaba. La única bajada es que los equipos tenían que ser de entre cuatro y seis personas. La no-estructura del proceso sacó a al luz varias personalidades: los que parecía como que conspiraban a ver en qué grupo se quedaban, los que tomaron el proceso como un “let it be”, los que se juntaron con los más amigos y los que se juntaron porque tenían una visión u objetivo común. Yo me incliné sobre el objetivo, pero sin preocuparme mucho, sabía que iba a formar un grupo de trabajo interesante.

Tenía claro que quería trabajar o en algo relacionado con biotecnología/medicina o en algo relacionado con política. Finalmente, y quizás siempre pensando en volver, me decidí por la política. Formamos un grupo para trabajar sobre el tema transparencia/corrupción buscando la manera de romper el sistema actual. En el equipo somos cinco: un americano hijo de indios, una brasilera, una holandesa y una inglesa. Todos con perfiles muy diferentes pero todos con ganas de cambiar las cosas.

Venir con ideas disruptivas, que revolucionen el mundo, cuando se trata con temas directamente relacionados con la tecnología, parece ser un poco más fácil. Ahora, tratar de cambiar el sistema en el que vivimos hace un par de cientos de años, dándonos cuenta que tal como está claramente no funciona, requiere algún esfuerzo adicional. Analizar el sistema donde uno nació y vivió toda la vida cuesta más de lo que parece e intentar romperlo sin caer en la tentación de arreglarlo, más aún.

Empezamos pensando que el problema de la corrupción era un problema de información. Después caímos que cualquier ciudadano (hablando siempre de democracias) abre el diario y vé quién roba y cómo lo hace y, sin embargo, no hacen nada para cambiarlo. Fuimos por el lado de la accesibilidad, la facilidad o las herramientas que tenemos para poder accionar sobre las cosas que funcionan mal en nuestras sociedades... de nuevo falló, otra red social para unir personas para accionar o herramientas que permitan acceder a quejas o algo así hay mil y no funcionan. Después de casi diez días de reunirnos, pensar, charlar, salir a comer, tomar algún buen bourbon o alguna cerveza parece que llegamos alguna hipótesis.

La idea marco es que hay con el actual sistema democrático el ciudadano común, el que trabaja, el que paga sus impuestos, no tiene noción de cómo las decisiones políticas lo afectan. Cuando en un diario sale “Cristina (por poner un nombre al azar) se robó 10 millones de dólares”, parece como que la plata que se robó pertenece a otro... a alguien llamado estado, eso que somos todos pero no es nadie. Asimismo, parece como que poca gente tiene noción o puede imaginar el impacto de esos montos en la economía de todos los días. El problema, entonces, no es que la información falte o que la gente quiera hacer algo y no pueda, es que simplemente no tiene idea de cómo ese problemita afecta sus vidas. ¿Qué hacer con esto?

Todavía nos falta mucho, pero ahora estamos explorando en el largo plazo a ir hacia una democracia directa. Las democracias representativas hacen que los representantes tengan demasiado poder como para poder manejar el total de la información que los ciudadanos usan para volver a elegir a los mismos representantes, entrando en un círculo vicioso. Nuestro objetivo es romper ese círculo vicioso en el cual caímos por la lógica implementación de un sistema que, a fin de cuentas fue inventado para cuando los ciudadanos eran unos pocos y no uno cuantos millones. Los griegos quizás tenían razón, pero Borges también, la democracia, tal como está ahora, es un uso abusivo de la estadística. Hay varios lugares donde se está aplicando o intentando aplicar y los resultados son dispares. Está el ejemplo de Icelandia, Suiza (a nivel Cantón) y algunas provincias de Alemania. Ningún sistema es la panacea, pero aprovechando la tecnología, en el mediano/largo plazo se puede apuntar a un nuevo modelo de representación/ejecución, no sin antes pasar una serie de pasos importantes que incluyen educación ad-hoc y cambio de mentalidades.


No les voy a contar todavía la idea de cómo hacerlo, en este post va sólo el objetivo. El primer paso, sin embargo, parece que sería analizar más en detalle el ciclo decisión->acción-> impacto. Me encantaría oír sus ideas al respecto. Y, a riesgo de ser clasificado como manguero, me sería muy útil que difundan y critiquen la idea. Como dice un amigo, be social, share!

AR

PS: esto no puede terminar de otra manera que no sea con los Sex Pistols.

domingo, 22 de julio de 2012


We are individuals!

Por primera vez me sentí realmente decepcionado en SU. El jueves pasado teníamos un evento “sorpresa” que develaron el miércoles a última hora: nos habían conseguido un pase preferencial para todos para ir a un evento de Tony Robbins. La verdad no tenía idea quién era este tipo, pero el CEO de SU lo presentó como el super coach de las personas más influyentes del mundo. Nombró presidentes, empresarios y multimbillonarios varios.
El jueves llegamos al evento, en el Convention Center de San José, donde había unas 7000 personas esperando para ver a este buen hombre que habían pagado, en promedio, mil dólares la entrada. Sisi, se había levantado 7 millones de dólares de una. Ya la cosa era medio rara, mucha gente eufórica pero me la aguanté.
Tony Robbins
Charlatan Profesional

Cuando empezó el “show” no era más que un tipo que hablaba como “Pare de Sufrir”, usando técnicas super básicas de manejo de masas y un grupo de zombies dejándose llevar por este salame que te enseña a vivir.
La cuestión es que el show empezó a la una y media de la tarde y terminó a pasada al una de la mañana. Sin parar, sin cortes, y con una caminata sobre brasas al rojo vivo. Se supone que en esa sesión la gente pierde le miedo a todo, inclusive a caminar sobre carbón prendido. Yo soporté hasta las tres y media de la tarde y me fui con una mezcla de vergüenza ajena y decepción. No podía creer que habíamos perdido un día de nuestro extremadamente escaso tiempo en esa boludez.
Entre el 60% y el 70% de los que fuimos nos fuimos antes de las 5 de la tarde. Cosa que, a fin de cuentas, me dejó un poco más tranquilo. Había solamente un 30% de personas fácilmente manipulables en el curso.
Pero esto no termina acá. Como Tony es amigo del CEO de SU, vino a una charla especial el viernes a la universidad. Esto el tipo no lo hace NUNCA, era una cosa super excepcional. Minutos antes de que entre a la sala, nos preguntaron si teníamos feedback sobre lo que había ocurrido el día anterior. Yo, siempre haciendo amigos, dije que me parecía que el tipo hacía lavado de cerebros básico y que su mensaje era una mierda, además que lo que habíamos visto ayer demostraba que las masas eran idiotas sin importar cuán inteligentes son los individuos que la componen. Dos más opinaron y dieron críticas pero más suaves, parece que hay gente que tiene miedo a decir lo que piensa.
Luego de esos 10 minutos de feedback entra el tipo, con todo el show alrededor y se pone a hablar un poco y empieza a levantar preguntas. “Casualmente” apunta primero a la que había balanceado la crítica con algo positivo durante la charla en la que él no estaba presente y se agarra de ahí para todo el resto de la hora que estoy charlataneando. Sin embargo, tras bambalinas pasaban cosas. Yo decidí no sentarme y me quedé parado en un borde del aula. Había entre 6 y 8 personas del staf de Tony. Claramente pasando data y guiándolo en su charla. A quién apuntar, cómo reaccionar y, quizás, qué decir.
Luego de la charla pasaron dos cosas totalmente opuestas. Mucha gente se acercó a decirme que estaba muy de acuerdo con lo que yo había dicho (algunos amigos hice después de todo). Me pregunto por qué ellos no lo dijeron, pero ese es otro tema. Pero, lo que más me impactó es que muchos de los que no salieron convencidos de la supermaratón del jueves, el viernes por la noche habían cambiado su punto diciendo que quizás no era tan malo, que tenía su lado positivo. Se habían borocoteado nomás.
Mi postura sigue igual. Su mensaje es una boludez, couching patético, un Stamateas con más marketing. No pagaría ni diez pesos por escucharlo. Pero lo que sí pagaría con gusto lo que sea para que me enseñe a comunicar mensajes como lo hace. Eso es realmente admirable.


Para los que les gusta el humor inglés, charlando con una compañera de curso, nos acordamos de "La vida de Brain", de Monty Python cuando dice a la masa de gente “Ustedes son individuos!” y la masa responde a coro “Nosotros somos individuos”. Me decepcionó SU y me hizo marcar un claro círculo de exclusión de respeto sobre algunas personas que están conmigo acá.



martes, 10 de julio de 2012


Singularidad, Argentina, Perón y Democracia

La política es una herramienta totalmente necesaria para poder lograr cualquier objetivo técnico supremo. Se supone que la singularidad se trata del impacto positivo de la evolución tecnológica en la humanidad. Sabemos que los gobiernos y las leyes pueden facilitar o perjudicar la evolución. En general la perjudicar.
Singularity es un “lugar seguro” para expresar ideas, sean de la naturaleza que sean. Tal es así que en la currícula de la universidad tuvimos algunas charlas políticas y surgieron ideas de lo más variadas. Desde lo más políticamente correcto hasta cuestiones que en cualquier ambiente no-seguro serían hasta peligrosas.

La primera charla que me impactó, dentro de las que tuvimos, fue la de Thor Halvorssen. A pesar de su nombre nórdico es un venezolano que tuvo una historia complicada asociada al gobierno “democrático” de Chavez. Asesinaron a la madre y encarcelaron a su padre por cuestiones políticas. Ahora pertenece al Human Right Foundation, conocida en todo el mundo por luchar contra regímenes autoritarios, como Cuba, China, Corea del Norte. Pero no se queda ahí. Algunos de sus postulados son:
  • cualquier fuerza que intenta limitar el conocimiento y la información está violando los derechos humanos.
  • el estado no debe limitar a los ciudadanos, sino viceversa.
  • las dictaduras se mantienen a través de la ignorancia de los ciudadanos. Una suerte de círculo vicioso: ciudadano ignorante – gobierno dictatorial que genera más ignorantes.

Esto hace que los gobiernos dictatoriales no se limiten a los no-democráticos, sino se extiendan también a los populistas. Los gobiernos que generan dependencia interna entre ellos y los ciudadanos a través de generar ignorancia, dificultar el desarrollo de librepensadores y limitar la libertad de prensa.

Presentación de Thor Halvorssen en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas

Cuando terminó su charla me acerqué a hablar para preguntarle su opinión sobre la realidad Argentina. Me comentó su preocupación sobre la venezualización de Argentina. Según su punto de vista, y en base a los estudios que hace la Human Rights Foundation, Argentina en los últimos 5 o 6 años fue perdiendo de manera preocupante la posibilidad de disenso. Los medios adquiridos por el gobierno (de manera directa o indirecta), el fanatismo por la cadena nacional, la necesidad de buscar demonios para echar culpas y el discurso de “están con nosotros o en nuestra contra”, parecen ser el camino para asegurar una falsa democracia. Una democracia donde la gente vota pero no elige. Donde la oposición desaparece y la alternancia está herida de muerte.

Yendo más allá, y bastante triste con la respuesta (a pesar de pensar lo mismo, es más complicado cuando te lo dice un tercero), seguí con un “Y cómo se sale de todo esto?”. La respuesta fue tajante: Argentina va a salir a delante el día que se saque de encima el estigma peronista. Perón fue lo peor que le pasó a tu país, me dijo. El hecho que para ganar una elección (o para mantenerse en el poder) haya que escudarse tras el peronismo no marca más que la ignorancia del pueblo. Sus ideas no han cambiado en 70 años.

La segunda charla interesante fue con Andrew McAfee, quién, después de hablar largo y tendido sobre las estrategias políticas y económicas que facilitan la evolución, publicó en su blog (http://andrewmcafee.org/blog/ ) lo siguiente:
“A lot of the proposals I heard were about appointing or finding an elite – a group of smart and enlightened philosopher kings – to guide their societies through the transitions that lie ahead. Such proposals are, by definition, anti-democratic, and as such they scare the hell out of me.”
Sobra con poner 80 personas en un lugar y hacerles creer que son los mejores para cambiar el mundo para que salga, casi de manera directa, la idea de la tecnocracia. La igualdad se puede dar entre iguales. La igualdad es de oportunidades, no de resultados. Igualar los resultados es, siempre, igualar para abajo. La “abundancia” propuesta por los seguidores de la singularidad permitirían igualar las oportunidades pero esto no va a ser posible si los gobiernos se empeñan por mantener una clase ignorante que los mantenga en el poder con poco esfuerzo intelectual de su parte. Parece que este buen hombre no estuvo tan de acuerdo con la idea.

En conclusión, y quizás en sintonía con el post anterior, creo que nos hace falta abrir más los ojos, reaccionar de una buena vez y buscar la manera de cambiar nuestro futuro. Superemos a Perón, busquemos transparencia y vayamos por igualar para arriba.

* Disclamer: estuve por poner este en el otro blog, el más técnico, pero me pareció algo que me afecta más a mi como persona que como técnico, por más que las ideas volcadas en este post sean 100% de las clases.

domingo, 8 de julio de 2012


Oh, say! can you see by the dawn's early light

A pesar de ser feriado en USA, en Singularity University no existen los feriados. Tuvimos clases como todos los días pero al finalizar el programa tuvimos la clásica barbacoa patria. A riesgo de ser llamado cipayo, prefiero el asado para festejar que el locro, sólo preferencias culinarias.

Después de cenar, a eso de las 19.30, empezamos a caminar hacia la parte de atrás de los Headquarters de Google, donde hay unas colinas de las cuales se podían ver mejor los fuegos artificiales.

La caminata fue larga y me dejó tres historias interesantes, una sola tiene que ver con el 4 de julio en sí.
Eramos unos cuantos caminando y se van armando grupos y charlando. Yo terminé caminando con un israelí y la conversación fue llevando a cómo se vive en nuestros países. Yo estaba tratando de explicarle qué es el populismo y todo lo mal que le está haciendo a latino América. No es cosa fácil de explicar pero fue entendiendo. En un momento me pregunta: “Vos podés viajar a Brasil?”. Pensé que no le había entendido la pregunta y pedí que me repita. Le respondo que sí, que con nuestro pasaporte podemos viajar a todo el mundo y que en Sudamérica nos podemos mover sólo con
la cédula. Me miró y me dijo “La verdad, siento algo de envidia. La paz que tienen es admirable, yo no puedo moverme de mi país y estoy siempre esperando a ver cuándo viene el próximo ataque”. Si bien sirvió 6 años al ejército, en la unidad de inteligencia electrónica, se lo veía poco orgulloso de su pueblo “guerrero”. No estoy seguro cuál es la lección de la charla, no me gusta decir “por lo menos tenemos paz”, pero creo que es algo los que la tenemos no valoramos, lo tomamos como algo de todos los días. Algo me quedó dando vuelta en la cabeza al respecto...

Después de una caminata de un par de kilómetros llegamos a la colina que buscábamos y empezaron los fuegos artificiales. Desde arriba podía mirar hacia cualquier lado y veía show. Duraron unos veinte minutos y fueron, por lejos, los más espectaculares que vi. Cuando estaba promediando, los americanos empezaron a pararse y a cantar a capella el himno. Ese tipo de movidas me ponen la piel de gallina. Fue totalmente espontáneo, un efecto dominó. Empezó uno y se fueron sumando los otros. Sienten realmente su patria y respetan sus símbolos.


En el retorno a casa (ya tomo el Ames Research Park como casa), vine charlando con una española. Intercambiando algunas historias de vida y viendo que a todos nos pasa más o menos lo mismo cuando estamos afuera. Ella vive acá hace un par de años y, como me pasa a mi, sigue buscando qué es lo que realmente le gusta, qué es lo próximo que va a estudiar o el próximo proyecto en el que se va a comprometer. Estuvimos sacando conclusiones de los problemas que tenemos los ingenieros en general, y los nerds en particular. Interesante encontrar que no estás sólo en el mundo. Interesante encontrar gente parecida a uno.